El impacto de la inteligencia artificial (IA) en el mundo es innegable, y su uso la industria musical es cada vez más común. Esto trae consigo problemáticas profundas, desde la creación de canciones falsas de artistas reconocidos hasta colaboraciones que nunca ocurrieron en la realidad. Entre tantas cosas, la IA permite rejuvenecer voces de artistas o incluso crear canciones desde cero a partir de breves instrucciones. En este contexto, surge la necesidad de regular y cuestionar su uso y sus implicaciones éticas.
Herramientas como MusicGen de Meta permiten a cualquier persona crear música a partir de indicaciones de texto, y con tan solo un par de tutoriales, los usuarios pueden aislar y reproducir la voz de cualquier artista. Un ejemplo de esto fue una colaboración falsa entre Drake y The Weeknd, que se volvió viral, sin embargo, Universal Music Group la retiró de las plataformas por considerarla "contenido infractor creado por IA generativa".
Las grandes compañías de la industria ya han comenzado a abordar esta cuestión y trabajar en regulaciones. pero, ¿cuál es la postura de aquellos que directamente se benefician o se ven afectados por el uso de inteligencia artificial en la música tanto en su proceso creativo como en su imagen personal entre otras tantas cosas?
El tema es complejo, por tanto, el debate sobre el uso de la IA en la música se ha intensificado en los últimos meses, dividiendo las opiniones en la comunidad musical. Entre los artistas que no están peleados con su uso podemos mencionar a Paul McCarney, que junto a su equipo de ingenieros de audio aprovecharon la IA para crear la última canción de The Beatles, extrayendo la voz de John Lennon de una grabación antigua.
McCartney enfatizó que el proceso no implicaba artificialidad y simplemente se centró en limpiar grabaciones existentes. “No se trata de la IA... No es que estemos fingiendo nada. En realidad, esa es la voz de John, la voz y el bajo de Paul, George en la guitarra rítmica y yo en la batería”, aclaró.
Por otro lado, artistas como Keith Richards de The Rolling Stones han expresado sus preocupaciones sobre la IA en la música, argumentando que, en la mayoría de los casos, la IA puede hacer que la música suene superficial y completamente artificial. Aunque su postura no es tan radical ya que, Richards sostiene que depende de cómo se use la IA.
“Grabar es, en cierto modo, un arte especial. Realmente no sé cómo expresarlo con palabras. Porque quiero decir, si pudieras poner la música y lo que hace en palabras, no tendría sentido. Pero el vinilo te dará lo que es real, algo que la inteligencia artificial no y prefiero escucharlo así. Me gusta lo real”, comentó Richards.
El icónico Nick Cave tampoco es partidario de su uso, Con una postura mucho más drástica, Cave se opone firmemente a la IA en la música y critica a ChatGPT en su blog. En palabras del músico, “(la IA) rechaza cualquier noción de lucha creativa, que nuestros esfuerzos animan y nutren nuestras vidas dándoles profundidad y significado. Rechaza que haya un espíritu humano colectivo, esencial e inconsciente que sustenta nuestra existencia, conectándonos a todos a través de nuestro esfuerzo mutuo".
También existe el caso de la banda inglesa Breezer, que usó la IA para incluir la voz de Liam Gallagher en su proyecto Aisis. “La IA nos dio la oportunidad de colaborar de una manera extrañísima con uno de nuestros artistas favoritos” declaró su baterista Joh Claire para Rolling Stone. Gallagher, el exlíder de Oasis, elogió abiertamente el álbum.
Otro de las posturas que han llamado la atención es la de la artista de electro-pop Grimes, La cantante optó por abrazar la IA al lanzar su propia IA llamada Elf.Tech, que permite a los usuarios transformar sus propias voces en la de Grimes. Los derechos de autor se distribuyen equitativamente entre la cantante y el usuario.
La IA está transformando la industria musical y, aunque la decisión de adoptarla o rechazarla depende de muchos factores, es fundamental trabajar en regulaciones legales para abordar el dilema ético y moral que conlleva su uso. La Academia de Grabación ya ha actualizado las reglas para los Premios Grammy de 2024, permitiendo el uso de herramientas de IA IA en el proceso de creación de música presentada para su nominación.
La IA es una fuerza disruptiva en la música y obliga a la industria a adaptarse y reflexionar sobre su impacto en la creatividad y la autenticidad artística.